15 de febrero de 2011

Víctor

Vio que lo saludaba.
Tenía una gran sonrisa, y movía rítmicamente la mano de un lado al otro.
Víctor no pudo evitar pensar que le parecía conocida. Sin dudarlo, sonrió con entusiasmo y devolvió el saludo.
Ella se acercaba, caminaba desde más adelante en la cuadra, desandando sus pasos.
Cada vez con más rapidez la mujer se acercaba, como si no pudiera esperar la colisión, a Víctor el corazón le palpitaba con fuerza.
Fue entonces cuando ella pasó a su lado, continuando su trayectoria, para finalmente abrazarse con un hombre vestido con bermudas.

3 comentarios :

  1. jajaja el típico "PLOP-hiperbolizado" seguramente Victor sacó su teléfono y simulo una llamada para disimular lo roja que tenía la cara.
    Siempre genial Sole, siempre resolviendo con placer la lectura de uno en este espacio.
    Un abrazo,

    Alejo

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  2. Pufff, las veces que me pasó lo mismo...

    Por suerte pude disimular mirando la hora en mi reloj pulsera.

    Salvo que nunca uso reloj...

    Saludos

    J.

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  3. Bueno, a mi me pasa muy seguido, pero me acuerdo que hace un par de años me pasó en un colectivo. No tenía donde esconderme.
    Saludos y Gracias.

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