27 de diciembre de 2010

La música, mi compañera


Soñando con escribirle unas palabras a un alguien inexistente, escuchaba a dos amigos tocar bossa.
En los gemidos de un saxo resbalaban mis amores y las teclas de un piano acomplejado mordían mis dudas.
Será que siempre soñaré con escribirle, sólo cuando la música me acompañe en un vaivén de ilusiones transparentes.

2 comentarios :

  1. ¡Hola Sole!
    A veces, solo a veces es transparente el pensamiento...

    Saludos de J.M. Ojeda.
    Buen Año 2011.

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  2. Cuando el piano no muerda las dudas, quizás ya inexistentes... podrás escribirle..

    Que hayas tenido un buen 2010 y que tengas un esplendoroso 2011 ;D

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